Los líderes de la "iglesia universal" llamada Iglesia Católica Romana sostiene que su origen se encuentra en la muerte, resurrección y ascensión de Jesucristo aproximadamente en el año 30 de nuestra era. Ellos proclaman que su organización es la Iglesia por la que murió Jesucristo, la Iglesia que fue establecida y construida por los apóstoles.