Esto nos lleva a lo que hoy se ha convertido en el pasaje más popular para identificar a Estados Unidos en la profecía bíblica. Se encuentra en el capítulo 18 de Apocalipsis el cual habla del gran imperio mundial dominante en los últimos días llamado “Babilonia la Grande”, el que será destruido por Dios un día, en una hora.
Imagine un mundo donde la gente puede entrar en los edificios y encender las máquinas utilizando un pequeño microchip en sus manos. Pues bien, ese futuro, al menos para Suecia no está demasiado lejos.
Las creencias de la gente sobre Satanás van de lo simplón a lo abstracto: de un hombrecito rojo con cuernos que se sienta en tu hombro impulsándote a pecar; a una expresión usada para describir la personificación del mal.
Lucifer es malvado pero no es estúpido. Cuando envíe a la Tierra al Falso Mesías o Anticristo para ejercer como el Gran Monarca y gobernante universal de todo el planeta, no va a ser en el mismo contexto social, político y religioso que ahora, en el que la civilización humana, principalmente la occidental, ha sido tutelada moral y espiritualmente por la Iglesia Católica durante 2000 años. ¿Y esto por qué?