Los líderes de la "iglesia universal" llamada Iglesia Católica Romana sostiene que su origen se encuentra en la muerte, resurrección y ascensión de Jesucristo aproximadamente en el año 30 de nuestra era. Ellos proclaman que su organización es la Iglesia por la que murió Jesucristo, la Iglesia que fue establecida y construida por los apóstoles.
El problema más crucial con la Iglesia Católica Romana es la creencia de que la sola fe en Jesucristo no es suficiente para la salvación.
Pueden encontrarse al menos tres significados en la etimología de la denominación latina de "Vaticanus":
La mayoría de los evangélicos que progresan hacia la madurez espiritual tendrán una comprensión más profunda de importantes posiciones doctrinales, sin embargo, muchos cristianos siguen luchando con las verdades básicas acerca de Dios, la Biblia y la salvación, según un estudio realizado por el Instituto LifeWay Research.