Continuamos hoy, amigo oyente, nuestro estudio en el libro de Génesis. Estamos aún considerando el cuarto capítulo de este primer libro del Antiguo Testamento, y al concluir nuestro programa anterior, mencionábamos el hecho de que Juan escribió en su epístola que las obras de Caín eran malas. ¿En qué forma fueron malas? Bueno, trajo una ofrenda a Dios que fue una manifestación de su naturaleza perversa. En nuestro estudio de hoy, encontramos a Caín saliendo de la presencia de Dios, y estableciendo una civilización que está completamente apartada de Dios. Y los hijos de Caín establecen una civilización impía. Y vamos a destacar dos o tres cosas de esta sección. Leemos en Génesis, capítulo 4, versículos 16 y 17, lo siguiente:
Continuamos hoy, amigo oyente, nuestro estudio en Génesis, el primer libro del Antiguo Testamento. Nos encontramos todavía en el tercer capítulo de este libro. Al concluir nuestra lección anterior, notamos el hecho de que al repetir Eva el mandamiento de Dios con respecto al árbol de la ciencia del bien y del mal, añadió las palabras ni le tocaréis, las cuales no fueron pronunciadas por Dios cuando dio el mandamiento original. Hoy comenzaremos nuestro estudio considerando el hecho de que la serpiente niega la Palabra de Dios. En los versículos 4 y 5 de este capítulo 3 de Génesis, leemos:
Comenzamos hoy, amigo oyente, a considerar como dijimos al comienzo, el primer libro de Moisés, llamado el Génesis. Y para este estudio y los demás que continuaremos, vamos a pedirle que tenga siempre su Biblia delante de usted. Para hoy vamos a buscar el primer libro, o sea el Génesis y mientras usted lo busca, quisiera darle algunas sugerencias. La primera es que lea todo el libro de Génesis y ojalá que lo lea todo en una sola ocasión. Reconocemos que a muchos no les será posible hacerlo de una sola vez. La verdad es que nunca he logrado yo leerlo así por causa de las muchas interrupciones, pero le hago esta sugerencia de que si en alguna manera le es posible a usted, procure leer el libro entero de Génesis de una sola vez.
Continuamos hoy, amigo oyente, considerando las guías para el entendimiento de las Escrituras, y llegamos a la última de las lecciones preliminares que hemos estado presentando. Hemos considerado ya cuatro guías o pasos importantes que debemos tener en cuenta. Estos son: Empezar con oración; leer la Biblia; estudiar la Biblia y meditar en la Biblia. Nos encontramos hoy al comienzo de la quinta guía o el quinto paso, para el entendimiento de las Escrituras. Este quinto paso es: Leer lo que otros han escrito acerca de la Biblia.
Estamos considerando las guías o pasos para el entendimiento de las Escrituras y ya hemos hablado de dos pasos, comenzamos a considerar el tercer paso en nuestro programa anterior. El primero fue empezar cada estudio bíblico con oración. El segundo paso es: Leer la Biblia. Y continuamos hoy considerando el tercer paso que comenzamos en el programa anterior y que es: Estudiar la Biblia. Y quisiéramos comenzar hoy desde donde nos detuvimos en nuestro programa anterior.
Continuamos hoy, amigo oyente, considerando las Guías para el Entendimiento de las Escrituras. Mencionamos en nuestro programa anterior que había siete declaraciones o pasos preliminares básicos que es necesario tener en cuenta, y estábamos tratando con el primer paso al final de nuestro estudio anterior. Dijimos que ese primer paso era: Empezar con oración y esto es lo que acabamos de hacer precisamente. Ahora, la razón para esto es que no es simplemente llenar una formalidad o llevar a cabo alguna ceremonia, ni es parte de un ritual de oración. En realidad, estamos frente a un Libro sobrenatural, un Libro que desea comunicarse con nosotros; pero que no se comunicará con nosotros por la sencilla razón de que únicamente el Espíritu de Dios es quien puede tomar las cosas de Cristo y revelárnoslas.